herzog caminando

El mundo se revela a quien viaja a pie. No lo voy a explicar más porque ya nadie viaja a pie, así que solo puedo decirlo como un dictamen. El bosque revela su verdad para quienes lo atraviesan a pie. No debemos detenernos en eso, porque estamos en Internet y quien vea esto va a estar en Internet y nadie viajará a pie mil millas. Soy perezoso como todos, pero viajo a pie cuando hay algo de importancia existencial. Entonces lo hago a pie. Si alguien en la Ciudad de Guatemala fuera de importancia existencial para mí y tuviera que verlo, viajaría sin importar la distancia, haría las 2000 millas. Creo que todavía lo haría. -Werner Herzog

En el invierno del 1974, Werner Herzog se enteró de que su amiga historiadora y crítica de cine Lotte Eisner, había enfermado. En un auténtico acto de fe, el cineasta pensó que si viajaba andando de Munich a París, su dolencia remitiría. 755 kilómetros después, así fue. Escribió durante el proceso Del caminar sobre el hielo, una especie de diario en el que plasmó las dudas, miedos y convicciones que le surgieron en su marcha.