En Argumosa 35, pastelería limpia y de aspecto aburrido, sin nada de especial. Muy buen trato, excepto para cobrar, que lo hace una máquina. Pasteles, tartas y comida para llevar. De los pocos sitios del barrio donde te puedes tomar un café después de las ocho de la tarde sin que te barran los pies, mientras en la calle diluvia.
Uy, esa calle está entre La casa Encendida y el Reina Sofía ¿ verdad? jaja y además dejan entrar a los perros ; )
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