Solíamos decir que una computadora solo hacía lo que le decías que hiciera, y exactamente lo que le decías que hiciera. Si bien eso sigue siendo cierto, hasta cierto punto, ahora estamos construyendo sistemas que se distribuyen masivamente, que se ejecutan en hardware que no controlamos y, en muchos casos, ni siquiera podemos ubicar. Nuestro antiguo modelo de computación (le dice al ordenador qué hacer, y si hay un error, es su culpa) ahora nos parece ingenuo y posiblemente el último suspiro de optimismo futurista. En el futuro, dependeremos cada vez más de sistemas en los que no necesariamente podemos confiar para cumplir nuestras órdenes y que fallan de manera indeterminada.
Mike Loukides en Radar
La tecnología avanza y avanza. Las máquinas cada vez más inteligentes y, lo que pensamos tiempo atrás era terreno futurista, hoy lo estamos viviendo.
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