La propia historia de Tinariwen brota con el mito y mitos en su país y más allá. Su historia es materia de leyendas. Su miembro fundador Ibrahim Ag Alhabib, creció en la desolación, en Malí, donde fue testigo de la muerte de su propio padre con cuatro años. Más tarde, después de ver una película del oeste, construyó su primera guitarra a partir de un alambre de bicicleta, un palo y una lata. La banda fue fundada en la década de 1980 en los campamentos tuareg en Libia, donde los pueblos nómadas se habían trasladado en busca de trabajo y una nueva vida lejos de su patria del Sahara. Desilusionado por las promesas de Quaddafi en su momento, temió por los tuareg y su anhelado hogar. Sin embargo, la interacción con la vida de la ciudad produjo consecuencias inesperadas, se vieron expuestos a la música más notable de los himnos de guitarra de Jimi Hendrix y los Blues americanos que se mezclan con sus propios lamentos sentimentales de los campos con amplificadores que funcionan con baterías. Cuando la revolución estalló de nuevo en Malí, abandonaron Libia, colgaron sus guitarras y recogieron las armas para luchar por la independencia tuareg. Cuando el conflicto se calmó, la banda volvió a la música, ofreciendo canciones impregnadas con dolorosa belleza y poesía solitaria. Luego, en la década de 1990, fueron descubiertos por los músicos occidentales y, por primera vez, sus canciones salieron del Sahara y se introdujeron en el mundo. En los siguientes diez años, los nómadas recorrieron el mundo, actuando en casi todos los festivales y lugares notables, ofreciendo al mundo una muestra de la belleza y los placeres solitarios de dolor de Assouf Sahara. tinariwen/bio
Arriba: Sesiones tasili de grabación y el video de una de sus canciones del nuevo álbum Emmaar, grabado en el Parque Natural Joshua Tree de California.
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