Bastante alucinante el Museo de la Mineria y la Industria de El Entrego, al lado de Langreo. Especialmente la mina y la enfermería, con esas preciosas maquetas del cuerpo humano. Comemos en Oviedo, cerca de su catedral gótica (s. XIV al XVI), en el restaurante El Naranco. Unas fabes con almejas riquísimas. Vemos el Templo de San Tirso, el Palacio Velarde, el Teatro Campoamor, el Ayuntamiento, el Barrio del Fontán y, a las afueras, San Julián de los Prados, Santa María de Bendones, Santa María del Naranco (donativo de 250 pelas) y San Miguel de Lillo. Precioso prerrománico. Los dos últimos edificios están juntos en un sitio tranquilo donde disfrutar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario