cristianos y demócratas a la hora de la verdad

Bombardeo Palacio de La Moneda. Wikimedia Commons

    Allende no era consciente del todo del peligro que la vía chilena al socialismo representaba para Estados Unidos. El entonces presidente, Richard Nixon, y su secretario de Estado, Henry Kissinger, veían en Allende el principal enemigo de América Latina, porque si su proyecto tenía éxito, podría replicarse en países clave del tablero de la Guerra Fría como Italia y Francia.

    Aunque aparentemente la Democracia Cristiana era una alternativa reformista frente a la derecha oligárquica y la izquierda marxista chilenas, en el momento más decisivo de la historia nacional en el siglo XX se alineó con las fuerzas políticas y sociales conservadoras y con los grandes intereses económicos para defender, al precio que fuera necesario, la sociedad capitalista. Tuvo una responsabilidad muy importante que nunca ha asumido. El partido se equivocó y actuó con una ceguera ideológica propia del anticomunismo de la Guerra Fría.

– Mario Amorós, historiador.