lunes, 20 de marzo de 2023

la cultura chimú





La Cultura Chimú, sucesora de la Mochica, se estableció en la costa norte del Perú, desde el 700 hasta 1470 dC. De reino, del que no sabemos la procedencia de su población, se convirtió en imperio, ocupando todos los valles adyacentes al del río Moche. El centro de esta cultura fue la ciudad de Chan Chan (la ciudad del sol en qignam), cerca de la actual ciudad de Trujillo, compuesta por miles de edificios de adobe y un laberinto de calles y callejones en el valle del río Moche. Las ruinas de la ciudad cubren casi un área de 20 kilómetros cuadrados. Sus muros aún mantienen sus adornos en relieve de peces y pelícanos, que demuestran la importancia del agua.

Chan Chan no se parece a ninguna otra ciudad del continente. Se compone de nueve ciudadelas, construidas totalmente en adobe, una sucesión de complejos reales ocultos tras imponentes muros de barro de hasta doce metros de alto y seiscientos de largo. Cada una estaba formada por un conjunto de corredores que conectaban almacenes, patios, albercas (huanchaques), residencias, inmensos patios ceremoniales de planta rectangular y grandes plataformas funerarias. Los muros de las ciudadelas estaban decorados con frisos geométricos que reproducían mamíferos, aves, peces, criaturas míticas…

Junto a las ciudadelas reales se alzaban complejos más pequeños, seguramente el hogar de nobles y burócratas que hacían funcionar la administración del Estado. Los barrios y distritos artesanos así como los huertos se hallaban en la periferia. Se cree que en su época de máximo esplendor Chan Chan pudo tener unos 35.000 habitantes.

Cuando un gobernante o curaca moría era enterrado en su propia morada, junto a sus bienes, pero no realizaba solo el viaje al inframundo: se hacía acompañar de una nutrida comitiva de jóvenes mujeres que habían sido sacrificadas. Ejemplo de ello es la plataforma funeraria de una de las ciudadelas, conocida en la actualidad como Nik An (Casa del Centro), donde además de la tumba del gobernante se hallaron 44 huecos para enterrar a sus acompañantes. Tras el suntuoso entierro, el sucesor construía otro complejo, una nueva ciudadela para él y su corte.

Con la ayuda de las conquistas y las guerras del pueblo de la cultura Chimú, formado por un estado muy burocratizado y en poder de una aristocracia curaca bajo la suprema autoridad de Chimú capac, durante sus días de gloria gobernó sobre una franja costera de terreno de 1000 km que casi llegó a la frontera norte del Perú. El estado de la cultura Chimú obtuvo su máxima expansión durante su última etapa (1350-1470 dC), tras haber derrotado a la cultura Sicán en el norte. El estado de la cultura Chimú compitió mucho con el Estado inca, que lo suprimió alrededor del año 1470 dC. Chan Chan fue conquistada por los incas. Lamentablemente, la ciudad, declarada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se sigue erosionando y rebajando sus muros.

Los pobladores de la cultura Chimú adoraban a la Luna debido a su creencia que influía sobre el crecimiento de las plantas, las mareas y a su utilización como marcador del tiempo. Creían descender de cuatro estrellas, de las dos mayores descendían los nobles y la gente común de las otras dos. Creían que el alma de los difuntos iba hasta la orilla del mar, desde donde era transportada por los lobos marinos hacia su última morada en las islas.

Su vida en el desierto peruano se hacía llevadera gracias un sistema de riego inteligente complejo que les permitió irrigar campos de cultivo y mantenimiento de jardines durante todo el año.También fueron hábiles artesanos, produciendo una gama de cerámica y una gran cantidad de objetos metálicos intrincados en oro, plata y cobre, que incluyen cuchillos, recipientes y joyería, así como textiles diversos, algunos decorados con plumas de colores .

La agricultura fue una de las principales preocupaciones, construyeron muchos kilómetros de canales de riego, incluyendo canales entre valles. La enorme área cosechada en el valle de Moche en tiempos prehispánicos todavía sobrepasa el área actualmente cultivada.

La pesca fue otra de las grandes fuentes de alimentación y comercio. Hay muchas representaciones cerámicas de pesca individual en caballitos de totora, que aún se usan en la costa peruana. También llegaron a domesticar a los pelícanos para pescar.

El sitio arqueológico de la cultura se caracteriza por muros muy altos, algunos de los cuales son de 26 metros de altura, que encierran las ciudadelas y las huacas, que es como se denomina a los lugares públicos, religiosos o palacios. Junto con Huaca pintada, Huaca del Dragón, Chan Chan tiene la más grande pirámide escalonada, que se encuentra en el norte de la ciudad, forman el grueso de la arquitectura monumental en el sitio. Cada uno de estos palacios, la mayoría de las cuales están dispuestos de una manera muy similar a pesar de las diferencias de tamaño, se caracterizan por tres tipos de estructuras: en forma de U audiencias, almacenes y pozos. En términos generales, los altos muros del sitio, largos pasillos, pasadizos tortuosos y sinuosas y entradas pequeñas muestran cómo meticulosamente como el régimen controlaba el flujo de personas dentro de los recintos.

La cerámica es continuadora de la mochica, la norteña. Las botellas con asa estribo serán nuevamente la forma predominante. En la esquina entre el pico y el asa de las piezas, se representa un pequeño mono. Como en el arte Mochica, la cerámica escultórica vuelve a alcanzar un rol protagónico. La élite Chimú opta por la cerámica negra, y renuncia tanto al uso de la policromía, como al asa puente con doble pico en la cerámica, rasgos claramente sureños. La cerámica Chimú se confeccionó utilizando moldes, ya que se trató de una producción alfarera en serie. Tal como dos mil años antes se representaba al felino como el poderoso que vencía al venado, en el arte Chimú se representa al ser humano cargando al venado sobre sus hombros, transmitiendo el mensaje de una humanización del poder.

Artísticamente, también se trabaja la madera y la metalurgia, llegando a un alto nivel en el trabajo del cobre, bronce arsénico, plata y oro. Para los textiles se utilizó la lana y el algodón. Se sacaba de la alpaca, la llama y la vicuña. El algodón se cultivaba en siete colores diferentes. Como prendas, usaban taparrabos, camisas sin mangas, ponchos y túnicas.

CerámicaChimú

2 comentarios:

  1. Tendemos a confundir la cultura moche y la chimú. La primera es bastante más antigua. Desde luego que Chan Chan es impresionante -ya podían tomar nota muchos arquitectos y decoradores actuales- y la cerámica tiene una capacidad imaginera e imaginativa insuperable. Qué bien que traigas a relucir en tu blog esta cultura.

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    1. En un viaje en combi de Trujillo a Pimentel quedé impresionado con aquellos muros y no tuve más remedio que acercarme. Lo que allí vi, y oí, fue increíble. Después pude comprobar que los caballitos de totora siguen usándose para pescar.

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