Este cuaderno debió pertenecer, según se indica en la primera hoja, a María Luisa de Orleans, la bella esposa de Carlos II, hija mayor de Felipe I, duque de Orleans, y de la princesa Enriqueta Ana de Inglaterra, hija del rey Carlos I. En él aparecen las figuras que su maestro le hacía y las que luego ella copiaba. Aunque no se trata de una cartilla en sí, pues es un cuaderno en blanco, ofrece un ejemplo de cómo la copia por el alumno a partir de un modelo realizado por el maestro ha sido siempre el modelo habitual del aprendizaje del dibujo. Es el hecho de ser un cuaderno rellenado a dos manos y no una cartilla impresa para ser usada como modelo, lo que para mí lo hace más interesante.
Folleto exposición El maestro de papel en el Museo del Prado
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