miércoles, 26 de octubre de 2022

silbatos de agua

Silbato cerámico de la cultura Vicús
(400aC-500dC), en el Norte de Perú,
representando un felino. De la colección de
Setgio Larrain y que se encuentra en el Museo
Chileno de Arte Precolombino..

Silbato de gallina medieval, siglo XII, 
de barro cocido, encontrado en Andújar (Jaén),
y expuesta en el Museo Provincial de Jaén.


Silbato de barro medieval, siglo XII,
de figura antropomorfa encontrado en la
construcción del campo hípico de Jaén y
expuesta en su Museo Provincial.

Silbatos de jarritos de pera con máscaras
antropomorfas adosadas representando a un varón 
barbudo con formas geométricas. Se realizaban a molde 
y se pegaban antes de la cocción Los hay vidriados y
sin vidriar. Museo de la Alhambra.

Silbato de semejantes características 
que el anterior con forma diferente y máscara
de rasgos femeninos, datado ente los siglos
XVI y XVII. Museo de la Alhambra.

Silbato de agua incompleto (1301=1400)
con máscara antropomorfa, fabricada a molde y con
una aplicación del instrumento. Arcilla perforada, con
cocción oxidante y trabajada en torno. Altura: 6,1 cm;
Grosor: 0,6 cm; Anchura máx.: 4,5 cm.
Museo de Almería.

Silbato nazarí (1301-1400) incompleto con máscara
con rasgos antropomorfos. Cerámica amarillenta sin alisar,
moldeada a mano, cocción axidante, torno. Altura: 6,8 cm.
Anchura Máx.: 6,9 cm. Museo de Almería

Silbato nazarí con forma de gallo,
de barro cocido y moldeado en molde. De gran
popularidad, han sido encontradas muchas
piezas similares en Granada, Jaén y Almería. 

                                         
Silbato de pájaro peruano de
cerámica modelada, bruñida, cocida y policromada
conpintura. Feria de Artesanía de la Universidad
Católica de Chile. 2015.


Silbatos de barro negro de Oaxaca, México,
representando una sirena y un pajarito, y creados 
por Lourdes Cardenal en 2011. 17,45 x 11,63.

Silbato de pájaro, ruiseñor,
hispanoamericano que en la actualidad
se vende en los mercados artesanos.


   
Silbatos de agua nazaríes

    Los silbatos son piezas populares, modeladas en un material económico como el barro y realizadas de forma rápida y sin muchas pretensiones. Precisamente este aspecto sencillo o incluso en ocasiones tosco, hizo que hasta hace relativamente poco tiempo no fueran elementos valorados ni objeto de investigación o estudio. Sin embargo, estos pequeños silbatos son piezas de interés, porque nos hablan de una vida cotidiana en la que también tenía cabida el aspecto lúdico y los juegos infantiles. Podemos distinguir dos variedades de silbatos, los que funcionan solo por la insuflación de aire y los silbatos de agua.      

    Los silbatos de agua son un tipo de aerófonos dotados de un recipiente para contener el agua que activa el sonido al soplar por el bisel, creando un burbujeo cuyo sonido es similar al de los pájaros. Esta fórmula se mantiene en uso infantil a nivel popular hasta nuestros días, y también se continua realizando como reclamo de caza. Resulta dificil diferenciar el uso. Los de forma de pájaro tienen un depósito bulboso para el agua, los nazaríes llevan el silbado adosado en la parte superior entre las dos alas. También con forma de gallina, con los ojos perforados. Y otros como jarritos que se llenan de agua, su piquera es el silbato y lleva adosada, en los silbatos medievales andaluces, una máscara humana con un hombre barbudo. 
Silbatos de agua nazaríes

    Existe una diversidad de piezas datadas de época nazarí, pero también muchas de ellas que corresponden a la etapa cristiana, lo que muestra la pervivencia de una tradición que, de hecho, ha llegado hasta nuestros días. Representando un pájaro, se conserva una pieza en el Museo Arqueológico de Granada precedente de la Necrópolis de Las Cuevas de la Arena de Baza; y también en el S.E. de Francia en las excavaciones de Petit Palais de Avignon, representando de forma clara un pájaro. 

    Otras piezas como silbato de agua, tienen un cuerpo en forma de pera hueco, con una pequeña perforación circular. En la parte más estrecha muestra una prolongación maciza. A un lado se proyecta un pitorro hueco cilíndrico  y en otro caso el silbato presenta dos formas abombadas huecas unidas, de las que ascienden una forma maciza que acabaría en un remate decorado y otra hueca de entrada de agua. A un lado queda el arranque de proyección central para entrada de aire. Presenta acabado vítreo en melado en su parte inferior.
    Con forma humana, tenemos una pieza hallada el la calle Duende de Granada y otras expuestas en el Museo de Jaén
    Otro modelo de silbato de agua es el que representa animales acuáticos.
    En general, en Hispanoamérica también se les llama vaso silbador o llorona. A veces son botellas, como la pieza de la colección de Larraín de la primera foto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario