Los capiteles medievales cuentan historias tremebundas con muñecos cabezones con grandes ojos que luchan contra seres extraños, mitad hombres, mitad bestias. También dioses y santos haciendo milagros. Una pasada. En mi reciente visita a las catedrales unidas de Salamanca (la vieja y la nueva) he disfrutado de ellos; más en lo que queda de la vieja, que es románica, que de la nueva, que es tardogótica-renacentista y, por tanto, menos interesante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario