El camarero echa la bronca a un cliente que ha enchufado su portátil a la red. El cliente pretende pagarle el gasto (calcula un euro y medio), pero el encargado le dice que se vaya a su casa a cargarlo. Cosa que no hace, está trabajando.
La rotación es tan frecuente que me resulta difícil terminar situaciones.
El café me cuesta un euro y medio, lo que la energía que consume una carga de batería.
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