Esta figura femenina de terracota, vestida con túnica larga y con ligadura
circular ajustada, y que mide 8.24 cm de altura y 2,72 de ancho, se encontró
en el yacimiento del Tossal de San Miguel de Liria, en la provincia de Valencia. Su manufactura se ha datado entre los siglos III y II aC, cuando este yacimiento era poblado ibero. Los brazos se han perdido, así como los pies, pero los primeros debieron ser articulados. Está pintada de color rojo, de óxido de hierro, desde el cuello hasta los pies y tiene una mancha de pintura en boca y otra en la parte posterior del tocado. La frente y los lados de la cara quedan bordeados por un conjunto de trazos incisos, cortos y oblicuos. Los ojos se marcan con dos pequeñas perforaciones. Tiene un agujero de suspensión que atraviesa la cabeza en vertical, seguramente para cogerla como una marioneta. Actualmente se encuentra en la vitrina 95 del Museo de Prehistoria de Valencia.
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