Solo 700 personas se salvaron del naufragio del Titanic; entre ellas, seis ciudadanos chinos que viajaban en tercera clase buscando una nueva vida en EEUU. Después de sufrir el shock del hundimiento, especialmente uno de ellos que se lanzó al agua helada y fue recogido por el bote 14, el único que volvió, nunca llegaron a bajarse del barco de rescate que los llevó a todos a Nueva York. Fueron hostigados con insultos racistas, acusados sin pruebas de haberse disfrazado de mujer para salvarse. Les metieron en otro barco y fueron deportados.
Los chinos fueron la mano de obra barata en los trabajos más duros de los USA. Ellos construyeron las líneas de ferrocarril, sacaron el mineral bajo las montañas o trabajaron en barcos comerciales. Sin embargo, a estos trabajadores les aplicaron la Ley de Exclusión. Caso muy parecido en el Reino Unido: los marineros que participaron en la Guerra Mundial en la marina inglesa, fueron deportados sin previo aviso a Asia al acabar ésta.
El último secreto del Titanic es un interesante documental de investigación sobre la supervivencia y la dignidad de estas personas frente al racismo y las políticas antiinmigración, tan presentes también en la actualidad. Un homenaje a toda una generación de ciudadanos chinos que se enfrentaron durante toda su vida a la discriminación y al muro del rechazo al diferente.
Fue proyectado en el programa de RTVE
Documentos TV. Aún puedes verlo hasta el 30 de junio
AQUÍ. Te lo recomiendo.
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