la culpa

El juego de la culpa es inútil y extrañamente fácil. Desvía la atención del llamado humano más profundo a luchar con nuestra triste capacidad de convertir a nuestros vecinos en enemigos, y cómo los males que nos infligen tan a menudo se convierten en los males que infligimos a los demás. En medio de esa lucha, somos responsables de nuestras decisiones y deberíamos poder reconocer que las mujeres no son sus propios violadores y que no se puede culpar a los bebés por su propio asesinato. -Diana Butler Bass en Historia y Culpa