jueves, 19 de enero de 2012
subida al altiplano central
Cogemos un bus-cama de la empresa Salazar para llegar durmiendo a Huancayo. La cama es formidable. despertamos a la seis y media o siete de la mañana, pero, gran tragedia, estamos atascados en medio de la carretera desde hace varias horas. Salimos a estirar las piernas, dibujo algo. Los coches chicos se meten en el carril izquierdo y el caos es total. A las ocho y media aparece un coche de la policía, por el megáfono pide paciencia, circulará un carril para las diez. Subimos muy despacio, tanto que voy dibujando los paisajes de eterna subida hasta el altiplano. Nuestro asientos están en la primera fila del segundo piso, con unas vistas cojonudas. Encima de nosotros están los puentes metálicos del tren de Ayacucho, que en esta época no funciona, uniendo agujeros en las paredes. 3.000 metros, 4.600, 4.867. Empieza a dolernos la cabeza, los rotuladores y pinceles recargables explotan y ponen todo perdidico perdío. Tengo que dibujar con acuarelas, que es lo único que funciona, Beni me sujeta el agua. Dibujando olvido mi mal estado, mis problemas respiratorios, mi mal de altura.
Al llegar a los lagos de la Mina Ticlio, todo blanco de nieve, todo el mundo está desesperado. Una cholita llama a un familiar para que este dé parte a la policía. La policía interviene y acaba con el atasco. A las cinco llegamos a la Oroya, que es la mitad del camino. Se pone a llover, para colmo, y ni vemos ni dibujamos. Sólo nos queda el bacile de las cholitas de atrás, que aún mantienen el sentido del humor. La cabeza estalla. Llegamos exhaustos, machacados. Unos anticuchos a la brasa (no hemos comido nada desde anoche) y a la piltra. Mañana será otro día.
Mi primera idea del Perú, como país exótico, me vino de la lectura de Tintín . Uno de los primeros tebeos que llegaron a mis manos es el que aparece en la foto, cuyas aventuras suceden en este país. En él aparecen las imágenes del tren que sube al altiplano atravesando los desfiladeros de los Andes sobre estructuras metálicas. Las mismas que hemos visto en este trayecto.
Efectivamente manana sera otro dia, pero que divertido ha tenido que ese ;)
ResponderEliminarEn tus dibujos no se refleja tu mal de altura, sí lo grande que eres.
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