Louise Bourgeois nació en París en 1911, donde estudió arte en varias escuelas, incluidas la Escuela del Louvre, la Academia de Bellas Artes, la Academia Julian y el Atelier Fernand Léger. En 1938, emigró a los Estados Unidos y continuó sus estudios en la Art Students League en Nueva York. Aunque sus comienzos fueron como grabadora y pintora, en la década de 1940 había centrado su atención en el trabajo escultórico, por lo que ahora es reconocida como una maestra del siglo XX. Muy influenciada por la afluencia de artistas surrealistas europeos que emigraron a los Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial, la escultura temprana de Bourgeois estaba compuesta de agrupaciones de formas abstractas y orgánicas, a menudo talladas en madera. En la década de 1960 comenzó a ejecutar su trabajo en caucho, bronce y piedra, y las piezas se hicieron más grandes, más referenciales a lo que se ha convertido en el tema dominante de su trabajo: su infancia. Ella ha declarado:
Mi infancia nunca perdió su magia, nunca perdió su misterio y nunca perdió su drama. Profundamente simbólico, su trabajo utiliza su relación con sus padres y el papel que jugó la sexualidad en su vida familiar temprana como un vocabulario para comprender y rehacer esa historia. Las formas antropomórficas que toman sus piezas (los cuerpos femenino y masculino son continuamente referenciados y rehechos) están cargadas de sexualidad e inocencia y la interacción entre los dos. El trabajo de Bourgeois se encuentra en las colecciones de la mayoría de los museos más importantes del mundo. Ella vivía en Nueva York, donde falleció en mayo de 2010.
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